
Uno aprende a montar moscas bajo el prisma de lo común, de lo que ve “habitualmente”.
Utilizar un tipo de materiales que se vuelven indispensables.

Y entonces a base de tiempo asimilas que, cuerpos de moscas se montan con materiales más bien opacos (biots, quill, sedas) sin pararte a pensar si el cuerpo de los insectos que en definitiva es lo que tratamos de imitar está representados por dichas cualidades.

-¿¿Son o no son opacos los cuerpos de los insectos??-
-¿¿Como ven las truchas las moscas??-
Son cuestiones que al principio de montar moscas ni nos paramos a pensar.

Tan solo sabemos que las B. Rhodani son de color verde.
-¿¿¿¿¿?????-
Tan solo sabemos que las B. Vernus son grises.
-¿¿¿¿????-
Tan solo sabemos que las N. Níger son negras.
-¿¿¿¿????-

Y no nos damos cuenta lo difícil que es para un entomólogo experto diferenciar una mosca de otra y, que la gran mayoría de nosotros los mosqueros erramos al determinar las moscas que vemos.
Acaso con el tiempo, tienes la fortuna de que “alguien que sabe un poquito del tema” te abra los ojos.

Te anime a que veas con tus propios ojos los insectos que ves por las aguas, sin pararte a pensar si son Fuscatus, Dorsalis, Cloroperlidae, o cualquier otro nombre rimbombante.

Y, tras observar el insecto, recapacites sobre el modo que tiene la trucha de ver dicho bichito.

Es entonces cuando te topas de bruces con una escuela de montaje que se sale de lo común, que rompe moldes, que existe hace muchos años pero que circula fuera de modas y modismos.

Evalúas los montajes, recapacitas sobre lo que estás viendo, y al fin observas en acción de pesca como funcionan.

Y entonces se te rompen los moldes, ves cuan ciego has estado y que debes empezar desde el principio.

Y no te queda otra sino volver a ser aprendiz y adobar anzuelos según tus instintos y observaciones.

Poco a poco consigues confeccionar algún montaje con el que quedas mínimamente satisfecho.
LasmoscasdePaco.