De Ríos y de Truchas. Y de Pesca a Mosca. Y de amigos mosqueros.

Aquí se plasmarán todas esas ideas, sensaciones y vivencias de un pescador a mosca y de su grupo de compañeros.

Su finalidad es tratar de inculcar que la pesca a mosca puede llegar a ser una forma de vida.

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miércoles, 6 de agosto de 2014

SIERRA NORTE... DESPEDIDA DE TEMPORADA...

          La Temporada en la Sierra Norte ha sido extraña. 

Obligados a pescarla un mes más tarde de costumbre... en teoría, hemos perdido unas jornadas de pesca en parajes donde acostumbrábamos, lugares que apenas se han podido pescar quince o veinte días porque luego el rio (que éste sí que sabe de lo que le ocurre) aconsejaba no pescarlo ya por su mermado caudal... temporada de pesca de menos de un mes... estaréis contentos personajetes... en fin.

 
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Pese a las trabas hemos disfrutado de "docenita y media" de salidas de pesca en varios ríos y, a fuer de ser sincero, la mayoría de las veces pródigos en capturas.
 
No podía dejar pasar la temporada sin despedirme de la Sierra Norte y el ultimo día de temporada me acerque a uno de los ríos más entrañables de aquella zona.
 
Pese al estiaje mantenía un nivel de aguas aceptable para practicar la pesca, al proliferar los tramos de rio en galería la sombra propicia una temperatura del agua comedida.

 
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El rio es difícil y técnico. 

Rio en galería y a mayor dificultad muchos arboles caídos atravesando el cauce que imposibilitan el lance definitivamente.
 
Sin eclosiones, sin cebadas, tan solo queda pescar al agua, tantear tramos y sacar conclusiones.

 
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Los primeros rechazos vinieron por parte del trico que activaban la curiosidad de las truchas, se acercaban a él y tras estudiarlo rechazaban. 

Al menos fue útil para determinar la posición de las truchas, curiosamente estaban en la zona central de las tablas, en aguas más bien calmadas.

 
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La marroncita, como casi siempre se mostro eficaz y las truchas la tomaban bien.
 
La pesca pasaba por encontrar el lugar donde poder lanzar, algún pequeño tramo de tabla donde a base de rodado poder posar la mosca a mitad de tabla, había que andar bastante entre tramo y tramo por la imposibilidad del lance. Bien por lo cerrado de la maleza, bien por los arboles caídos atravesados, tras encontrar el tramo, lanzar con algo de tino y presteza daba por regla general la cebada de la trucha al engaño ofrecido.

 
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Truchuelas todas ellas con una única excepción.

El cuidado pasaba por no dejarlas orillarse y que se metieran en la maraña entrecruzada de las raíces de los arboles.

 
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Pescaba una pequeña tabla, arrodillado pues los arboles en galería no me permitían lanzar de pie. 

Alargaba el lance rodado que, aunque este mal decirlo no se me da mal y posaba la mosca con tino en el lugar escogido que, a mayor abundar no tenia mayor dificultad que alargar el lance y dejar caer la mosca en mitad del rio. 

Había conseguido ya un par de capturas de truchuelas en dicha tabla y, volví a tener otra picada. 

Picada sutil, diminuta, que me hizo creer seria un juvenil osado.
 
Mas cuando tenso el hilo y realizo el clavado a base de tensión noto como la caña se curva y como al extremo del sedal mi oponente ofrece una resistencia inusitada.
 
La trucha, de buen tamaño plantea brava batalla y yo me encuentro muy en desventaja. 

Arrodillado no consigo ni poner erguida la caña, pues el puntal roza en las ramas de los arboles.

 
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La trucha busca escapatoria y amparo en las raíces de la orilla y yo, con la caña casi a ras de agua doblego sus intenciones y trato de mantenerla en el centro del rio, donde hace por buscar el fondo.
 
Poca distancia media entre nos, mas no encuentro forma de acercar la trucha a distancia de tiro de sacadera.
 
Al fin la trucha sale a superficie dando síntomas de ser vencida, es el momento se sujetar la caña a la altura de la primera anilla, y así consigo atraer a tan brava oponente a distancia de poder apresarla.
 
Chapotea por las aguas, realiza un par de cabriolas que no evitan que al fin consiga enmallarla.
 
Es una preciosa trucha. 

Una Lamia del rio con las que uno sueña encontrarse y no siempre ocurre.

 
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La desanzuelo con cuidado, la meto en las aguas dentro de la sacadera mientras con presteza preparo la cámara de fotos y, con prontitud realizo un par de fotos de tan bella Lamia, tras ello la devuelvo a la oscuridad de las aguas donde habita, territorio en sombras donde el divagar de la imaginación imagina sueños de mosquero ilusionado.
 
Sigo pescando, consigo nuevas capturas de truchuelas que quizás ahora me sepan a menos que las primeras del día.

 
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Al fin llego a un azud que conozco y con el que consigo orientarme del lugar donde me encuentro... he ascendido un buen tramo de rio y sé que por encima del azud queda un trecho que nunca me dio demasiadas satisfacciones. 

Miro el reloj, son las 20 horas, si el antiguo camino del canal no está perdido podría llegar donde deje el auto en algo más de media hora... si no tendría que bajar por el rio y el tiempo aumentaría considerablemente.
 
Doy por terminada la jornada de pesca. 

Me siento satisfecho. Satisfecho por pescar tan entrañable rio, satisfecho por la cifra asaz de capturas y satisfecho por haber conseguido capturar una Lamia del rio... que más puedo pedir.

 
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Desmonto la caña, la guardo en su funda de tela, guardo el carrete en un bolsillo del chaleco.

Me desvisto de chaleco y  camisa, pesco sin vader. 

Me meto en el rio y me chapuzo y refresco con sus aguas, tras ello tomo los últimos tragos de agua de la cantimplora y como una manzana. 

Recompongo la figura y a desandar camino.
 
Ha sido una gratísima despedida de temporada en la Sierra Norte. 

Aún antes de meterme en el auto ojeo el rio, me embarga una gran sensación de cariño, de aprecio. 

Muchos, pero que muchos años pasaron desde que empecé a pescar este rio... siendo un mozalbete... algunas Lamias he conocido tras el paso del tiempo.

 
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Tan solo deseo volver a encontrar una nueva Lamia la próxima temporada... ahora toca guardar veda. 

Toca medirse con nuevos retos en otros ríos, futuro indeciso que espero poder relatar.
 
Fin de la temporada de pesca en la Sierra Norte. 


 
                            LasmoscasdePaco.

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