Provenía de un mosquero y comentaba que seguía con interés éste blog de pesca, que pescaba varios ríos que aquí aparecían y me ofrecía poder compartir una jornada de pesca.
Al fin nos pusimos de acuerdo y nos encaminamos echar unas varadas a un tramo del rio Tajo.
El rio Tajo se mostro Tajo.
O sea, parco muy parco en capturas. A mas decir coseche un nuevo bolo pese a pescar zonas muy interesantes.
Mi compañero, Ángel también consiguió pocas capturas, aunque la conseguida, lograda en un fuerte chorro del rio fue bonita e interesante como el video atestigua.
Esperando metidos en las aguas el cielo se colmo de estrellas, nosotros ilusionados por disfrutar de un sereno que nos deparara la captura de algunas pintonas.
No sucedió, igual de cerrado como estuvo toda la tarde se mantuvo al caer la luz. No hubo eclosión de insectos y tampoco hubo sereno.
Días como estos es cuando se demuestra la horma del mosquero.
Cuando vuelves para casa sin apenas haber visto pintas rojas y sin embargo contento y con ánimos de volver y repetir.
-Ángel. Como hubiera cambiado la cosa si esa gran trucha que vimos, esa loba del rio hubiera querido tomar la mosca que la ofrecimos-
Y tras una jornada con buena caminata sudorosa por el monte.
Tras un par de traspiés vadeando que remojo nuestros cuerpos.
Tras horas de lanzar acá y allá buenas posturas con vanos resultados.
Tras todo ello recibo un nuevo correo de agradecimiento por la jornada de pesca y tendiéndome la mano para repetir.
-¡¡Forja de mosquero!!-
LasmoscasdePaco.
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