De Ríos y de Truchas. Y de Pesca a Mosca. Y de amigos mosqueros.

Aquí se plasmarán todas esas ideas, sensaciones y vivencias de un pescador a mosca y de su grupo de compañeros.

Su finalidad es tratar de inculcar que la pesca a mosca puede llegar a ser una forma de vida.

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Competición NO..... Gracias.

domingo, 19 de febrero de 2012

HACE YA TIEMPO…

          Hace ya tiempo, tanto tiempo que los componentes de esta historia pescan ya ríos diferentes, el uno los ríos que el buen Dios reserva a los mejores mosqueros, el otro sigue pescando el mismo rio en que el relato se basa, acaso diferente por el devenir del tiempo, pero las rocas, las rocas intemporales que pisa por el rio son las mismas.

Hace ya mucho tiempo me encontraba en la plaza de un “pueblo negro” de la serranía de Guadalajara, en el centro de la plaza sentado en el pretil de la fuente un hombre miraba las aguas.

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Me acerque y observe que miraba una pequeña trucha que nadaba en el fondo del pilón.

-Dime, tu como las pescarías?- me pregunto.

-Con una mosca seca, me apartaría de la fuente y le lanzaría una mosca seca, quizás una oliva- respondí.

-Te llevaría su tiempo.-

-Pero sería la forma de disfrutar pescándola.-

Se quedo mirandome, mesándose la barba del mentón, lentamente hizo un gesto con la cabeza, como afirmando. Me alargo su mano.

-Que tal, me llamo Rafael.-

-Lo sé, yo me llamo Paco, encantado- y estreche su mano en un fuerte apretón.

Marche a desayunar a un mesón del pueblo. Tras ello baje al cercano rio para disfrutar de una jornada de pesca.

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Pescaba una larga tabla, la corriente se pegaba a las rocas de la orilla opuesta donde me encontraba, disfrutaba lanzando la mosca a la corriente, viendo como derivaba por las aguas.

-Hola pescador.-

Volví la cabeza y me encontré de nuevo con la persona que vi en la plaza del pueblo.

-Hola-

-Que tal, pescas con una mosca seca de color oliva?-

-Si, lo intento-

Lancé mi mosca a las aguas, navegaba rebrincando por la corriente cuando una trucha se cebo a ella. Clave con certeza. La trucha se lanzo impetuosa por la corriente rio abajo, yo trate de domeñar su empeño, conseguí sacarla de las aguas rápidas e irla acercando poco a poco a mi posición.
Me sentía muy ufano, tanto por la captura como por quien me observaba.

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De repente la trucha se lanzo rauda a unas ramas que afloraban del agua, no pude evitarlo, la pintona se enmaraño en las ramas y tras cuatro tirones rompió el bajo y escapo.

-Bonito lance, lástima que no haya tenido buen final-

-Da lo mismo. Disfrute de la lucha, el que se haya soltado es anécdota. Lo peor que perdí la mosca.-

Al igual que en la mañana, mirándome a la cara y mesándose la barba del mentón afirmo con un gesto de la cabeza.

De su chaleco saco una caja de moscas, rebusco en ella y cogió una.

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-Toma Paco, a ver si con esta pescas buenas truchas.-

-Gracias, Rafael.-

Le vi alejarse, caminando por la orilla rio arriba, no le seguí pues entendí que quien acude en solitario a estos parajes es para disfrutar íntimamente de la pesca, sin compañía.

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En el presente, cada vez que me encuentro en esa tabla del rio recuerdo a un gran pescador, a Rafael. Aun conservo su mosca, uno más de mis “tesoros” que guardo celosamente.

Volví a encontrarme con Rafael en alguna ocasión y con extrañeza por mi parte, siempre recordaba el lugar donde nos conocimos. Pero esto ya pertenece a otro capítulo.

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Siempre he dicho que soy afortunado en esto de la pesca a mosca. No ya por muchas o pocas capturas que, a fin de cuentas no son más que una cifra baladí, sino porque la fortuna tuvo a bien el poder conocer a un buen puñado de buenos mosqueros de los que aprendí mucho, mucho más que clavar truchas.


                  LasmoscasdePaco.

3 comentarios:

  1. Muy interesante la historia del mosquero que llego a conocer en Guadalajara. Bonita la mosca tambien. Quien sabe, tal vez me pongo a montar unas de ellas yo mismo. Gracias por su cuento.

    Que siga disfrutando de la pesca a mosca,
    M.O.

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  2. Otro bonito artículo en tu blog PACO.

    Desde luego que un encuentro así es como para no olvidarlo. Máxime en el entorno de la bonita sierra y de los pueblos negros. ¿La fuente de Valverde quizás?.

    Saludos. Agustín.

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  3. Que bueno que guardes tan buenos recuerdos. Y que bueno que puedas transmitirnos la emoción que sientes a evocarlos. Tu entrada deja claro que la en la pesca con mosca, los peces no son lo más importante. Enhorabuena!

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